Angeles caidos

La noche era fria y sielnciosa. las doce campanadas del relog de la cieudad sonaron levantando ecos y rompiendo el silencio de las calles. Sara caminaba sola, habia salido tarde de la oficina, no había sido por trabajo si no por placer. Caminaba altiva y desafiante por las estrellas callejuelas del barrio antigua camino de su lujoso aparcamiento, sus tacones resonaban a cada paso indicando el camino que podia seguir cuanlquier ciego de la ciudad. Esa noche estaba contenta y orgullosa de lo que habia conseguido, finalmente habia conseguido atraer sexualmente al dueño de la empresa, despues de estar con el diector habia decidido escalar un poco mas y llegar hasta la misma cima, los medios no eran importantes para ella solo le importaba el final y lo habia conseguido. Continuo caminando en silencio, riendose por dentro de la debilidad de los hombres que habia conquistado solo con su cuerpo. Los habia dominadoy anulado ahora no eran mas que meros sirvientes para sus planes.
De repente se tamabaleo y apollo una de sus mnos en la pared conmocionada. Durante unos momentos toda su vida habia circulado por su mente como en una pelicula. pero ella no creia en suceosos extraños por lo que continuo caminando sin darle importancia. A escasos metros de su casa escucho un ruido detras de ella. Se detuvo y miro hacia atras pero la calle permanecia desierta. Empezo a asustarse por lo que aumento la velocidad de sus pasos el ruido se volvio a escuchar. Un chillido salio de la garganta de la joven pero no llego a sonar cuando un tremendo golpe en la espalda la mando de boca al suelo. se partio udos dientes y el labio en la caida y la sangre empezo a salir de su boca mientras se levantaba como podia del suelo una pesada bota le oprimio la esplada y le obligo a tumbarse de nuevo.
-¿Quien eres? ¿que quieres de mi? llevate el dinero pero dejame.
Las lagrimas afloraron de los ojso de la chica y por primera vez en su vida sintio el miedo recorrerle el cuerpo hsta el punto de paralizar sus musculos.
La lluvia empezo a caer durante unos segundos lentamente despues de golpe llenando las calles de agua, La cortina de agua empapo a la chica y a la extraña figura. La joven no podia levantarse y lloraba desconsoladamente olvidandose de la lluvia.
La extraña figura, sonrio y se quito la capucha de su chaqueton de piel. Su pelo era negro como el ala de un cuervo y sus rasgos aunque finos eran extremadamente delicados casi como una muñequita, la gabardina ocultaba su cuerpo pero por la fuerza con la que sostenia a la chica se adivinaba que era mucha.
-Vas a morir por tus pecados.
Esas eran las unicas palabras de la misteriosa joven, despues dejo de sonreir y se abalanzo sobre la joven abrio la boca y mordio con extrema fuerza el joven de su preisionera. La desgraciada intento gritar pero la boca se le llenaba de la sangre que su asesina no absorvia con una avidez nunca vista.
Cuando ya no quedo nada vivo salvo la asesina se hizo el silencio y dejo de llover, el agua arrastro las ultimas gotas del suelo. La mujer de negro se levanto y limpiandose la boca con el dorso de la mano miro al cielo y grito. La gente que dormia sintio como la sangre se helaba en las venas como si estas, fueran de escarcha y transportaran hielo en vez de sangre. Pero al amanecer lo recordarian como una pesadilla.
La desconocida sonrio cogio el cuerpo inerte y de un salto poderoso abandono las calles.
La policia busco a la chica durante dias pero jamas la hallaron. desaparecio de la faz de la tierra como si nunca hubiera existido.
La desconocida desaparecio a la espera de que la sed volviera aparecer.